La globalización trajo consigo los tratados de libre
comercio, lo cual a su vez genero la necesidad de reflejar la información financiera
de una forma homogénea, es decir unifico los criterios para llevar la
contabilidad, permitiendo así la fácil comprensión de los estados financieros
por parte de cualquier inversionista del mundo.
Las NIIF son principios creados para la estandarización de los criterios contables y financieros; sin embargo para el
caso de Colombia, mediante la expedición de la Ley 1314 del año 2009, estos
principios pasaron a ser norma; lo que conllevo a una convergencia obligatoria
para todas las empresas nacionales, sin tener en cuenta que esta convergencia
era solo necesaria para aquellas grandes empresas (exportados y/o importadoras),
cuyo porcentaje en el mercado Colombiano representa una minoría, ya que en
Colombia aproximadamente el 90% de las empresas son PYMES, representándose esta
convergencia como un gasto demasiado oneroso e innecesario que muchas de estas
empresas no puede solventar.
Podemos afirmar que Colombia no estaba preparada para dicha
convergencia, ya que ni siquiera el gobierno y sus entes reguladores tenían definido
un plan de acción para la armonización y acoplamiento entre la norma colombiana
y las NIIF, además de lo anterior mencionado, también se resalta que empresas y
universidades no estaban preparadas para asumir este reto.
La falta de preparación para la adopción de NIIF por parte
del estado, género que en la actualidad exista la necesitas de manejar dos contabilidades,
una basada en normatividad tributaria y fiscal, cuyo objetivo es el pago de
impuestos y otra basada en NIIF, cuyo objetivo es la revelación de la situación
económica real de la empresa.
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